Para los niños la navidad se convierte en una época apasionante pero para un niño con autismo puede ser un verdadero trauma. Luces, ruidos, música fuerte, más tráfico, compras y un sinfín de cosas más. Y para rematar, con las vacaciones se rompe la rutina.
Con Marc lo que hice fue, como siempre, anticipación y desensibilización. Ponía villancicos en casa, compraba bolsas de cotillón (sobretodo por las trompetitas que molestan mucho), imágenes y pictos relacionados con esta época del año, etc. Pero principalmente necesita más que nunca una buena estructuración de lo que va a hacer y suceder durante el día para que su nivel de ansiedad no se dispare.
También enseñarle las figuras de Papá Noel y los Reyes Magos y eso si que se consiguió pronto, porque una de las primeras frases que dijo fue "Papa Noel es chulo" después de ver los regalos debajo del árbol.
Este librito se lo hice con 3 años y le vino muy bien. Ahora le sigue gustando, pero esta vez, en vez de leer mamá, lo lee él. También un memory para jugar.
Y esta canción navideña adaptada con pictogramas:
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